El año 2004 quedará para siempre marcado en la historia de Facebook. No en vano es la fecha de su nacimiento. Nueve años después la red social ha evolucionado y se ha convertido en una herramienta indispensable, por ejemplo, para que las empresas estén en contacto con sus clientes y les comuniquen sus ofertas o novedades. También un espacio de atención al cliente, con quejas incluidas, que hay que saber gestionar. Conscientes de la necesidad de las empresas de darse a conocer, sus desarrolladores lanzaron los anuncios pagados. Pero…¿son realmente efectivos?
Últimos estudios
Si contemplamos los últimos datos podemos interpretar que existen otras formas más eficaces para que nuestro anuncio llegue al cliente. Y es que el 30 por ciento de los usuarios de redes sociales recuerda lo que ve en ellas mientras que el 83 por ciento de los usuarios de Facebook casi nunca o nunca pulsa la publicidad que ve en su página.
Aún así es una estrategia a tener en cuenta a la hora de dar a conocer nuestra marca a través, por ejemplo, de publicaciones sugeridas.
¿Para qué es útil?
- Gracias a Facebook Ads podemos llegar a un público objetivo segmentado por ubicación, sexo, edad, lugar de trabajo, formación o intereses. Una nueva forma de acotar muy útil para llegar sólo a aquellos clientes potenciales que nos interesan.
- Podemos configurar un presupuesto diario y elegir la forma de pago: CPC (cuando el cliente haga click en el anuncio) o CPM (cuando lo ve).
- Es posible promocionar una página de Facebook o una externa además de crear un anuncio en el que predomine la imagen o el texto.
Formatos de anuncios
– Anuncios: Promociona tu evento, página o tu propio sitio web. Es recomendable incluir una llamada de atención y ventajas a aquellos usuarios de Facebook que visiten nuestro sitio.
– Post promocionados: aparecen en la página principal del usuario y tienen una llamada de atención clara para conseguir unir más fans.