Hoy he tenido una experiencia muy positiva en mi empresa y me he dado cuenta de la realidad que estamos viviendo las pymes de este país. A pesar de las circunstancias tan poco alentadoras por las que estamos pasando, es muy importante mantenerse alerta, cultivar el pensamiento positivo y alimentar el buen humor entre todo el personal.
George Bernard Shaw decía que no creía en las circunstancias. Y no le faltaba razón. Las circunstancias que ocurren no son creíbles, somos nosotros los que tenemos que salir adelante en la vida y buscar o crear nuestras propias circunstancias. Seguro que conoces a alguien que, ante unas circunstancias tremendamente difíciles, haya sido capaz de crear algo distinto y de innovar. Yo conozco a varias personas y todas ellas tienen algo en común: alegría, esfuerzo, constancia, dedicación y buen humor.
Séneca decía: “Señor, dame la serenidad para aceptar aquello que no puede ser cambiado, la fortaleza para cambiar aquello que sí puede ser cambiado y, sobre todo, dame la sabiduría para conocer la diferencia”.
Muchas veces, las cosas que suceden a nuestro alrededor no dependen de nosotros y no las podemos cambiar. Además, todo lo que sea añadir leña al fuego, lo aumentará. Por muchas energías que gastemos en cambiar cosas que son determinantes, y sabemos a ciencia cierta que no las podemos mover, nos privará de llevar esos mismos recursos y potencial hacia lugares donde sí podemos hacer cosas.
Vamos demasiado deprisa, olvidamos las cosas importantes de la vida, dejamos de reír y vivir para estar todo el día preocupados… por eso entiendo que es muy importante pararse y reflexionar sobre lo que hemos creado y tenemos gracias a nuestro esfuerzo. Un buen ejercicio es pararnos a ver todos los recursos con los que contamos y hacernos esta pregunta, ¿dónde puedo dar yo el mayor juego a todo lo que tengo? Las respuestas a esta pregunta nos irán planteando nuevos caminos y estrategias de actuación con ilusión y positivismo.
A veces, según las circunstancias, nos sentimos más deprimidos y desanimados. Nos cuesta recordar que muchas de las soluciones que estamos buscando las tenemos en nuestra memoria, una fuente de recursos alucinante. Si recordamos y buscamos en ella, seguro que encontraremos una gran cantidad de historias y experiencias que hemos vivido. Unas experiencias que nos hablarán de quiénes fuimos y de quieres somos en realidad: esto hará que avancemos en nuestro día a día con mucha más seguridad y firmeza. Lograremos entusiasmarnos de nuevo con muestro potencial y volveremos a crear circunstancias favorables para ser felices en la vida laboral y personal.