Ahora que está tan de moda el emprendimiento y debido a la situación económica actual, muchas personas se ponen manos a la obra y se lanzan a emprender proyectos. Esto está muy bien, sobre todo porque aportan, con el esfuerzo personal, a que nuestra economía se mueva y, no nos engañemos, somos los pequeños empresarios y los autónomos los que sacamos adelante este país.
Ayer estuve en una conferencia muy enriquecedora en el IESE sobre este tema (Errores que cometen los emprendedores), impartida por Carlos Blanco, y voy a intentar transmitiros lo que en ella aprendí sobre lo que no hay que hacer cuando quieras emprender:
Errores Corporativos
Ojo con la selección de socios: Se trata de uno de los errores más comunes y que no caemos la importancia que tiene a la hora de comenzar nuestro proyecto. Es muy normal que encontremos ejemplos de personas que se juntan porque han estudiado la misma carrera, han hecho un master en la misma escuela de negocios o son compañeros de trabajo. Curiosamente todos tienen el mismo perfil.
¿Creéis que es bueno que dos o tres personas que tengan el mismo perfil se junten para montar un proyecto? Creo que no es la mejor solución, pues en la diversidad de conocimientos está la victoria.
Por otra parte, es muy importante que tengas en cuenta que hacer negocios con la familia es un error. ¿Cómo trabajarías con alguien de tu familia de socio/a en una empresa? Recuerda que antes de contar con alguien de tu familia en la empresa debes preguntarte: ¿Meterías de socio a este familiar si no fuera tu familiar? Según la respuesta que tengas, es lo que debas hacer.
Además, tendrás que hacer una selección de socios según el tipo de negocio que vayas a montar. Cada tipo de compañía requiere un tipo de personas diferente.
Reparto accionarial: Es muy importante hacer un reparto correcto de acciones. Lo típico es:
- Nos juntamos tres socios, hacemos un reparto al 33% cada uno.
- Nos juntamos cuatro socios, hacemos un reparto al 25% cada uno.
- Nos juntamos dos socios, hacemos un reparto al 50 % cada uno (de las tres esta es la menos mala).
Para poder regular este reparto accionarial es básico hacerlo a través de un Pacto de Socios. Este pacto pondrá encima de la mesa qué ocurrirá si uno de los socios se marcha, quiere cambiar de situación, etc. Es preferible que todo esté escrito desde el principio para que no ocurra ningún problema y, en definitiva, la sociedad se pueda controlar eficientemente.
Seguro que os estaréis preguntando ¿cómo se hace esto? Para que todo sea correcto y puedas seguir estos pasos, lo mejor que te recomiendo es que tires de un abogado especializado en el mundo de las startups. Sin duda te ayudará en tus inicios.
Una vez que tengas los temas legales más o menos encaminados, debes pensar también en cuál es la cultura de tu empresa. ¿Quieres ser low cost o quieres vender al sector del lujo? Esto te marcará el camino, la misión de tu empresa y los valores que debéis fijar.
Errores personales del emprendedor
Muchos de los proyectos que comienzan carecen de liderazgo: No hay un líder. La gran mayoría son proyectos en el que todos tienen en mismo porcentaje y no hay un líder claro. Además todos asumen casi las mismas competencias.
Para ser emprendedor debes arriesgar. Si tu perfil es de una persona que vive intranquila si no cobra a final de mes, lo tienes complicado. Muchos cometen el error de emprender sin tener esa capacidad de liderazgo, y esto conlleva que el conocimiento sea transversal, es decir, no vale saber solo mucho de Marketing, si no tienes ni idea de finanzas. Debes formarte en aquello que no controlas para poder conocer las distintas áreas de la empresa. No se trata de ser un crack en todo, pero al menos conocer de qué estamos hablando.
Otro de los problemas que nos encontramos cuando emprendemos es el individualismo, es decir, un solo emprendedor que cree que sabe de todo, el reparto de acciones lo hace desproporcionado a su favor y… sin él la compañía no funcionaría. Hay que conocer un poco de todo, pero después hay expertos que pueden sacar el trabajo mucho mejor.
La dedicación es otro punto importante. Si no tienes un momento personal a nivel de economía, familia, coste de tu vida, etc. que sea propicio, lo vas a tener más complicado. El emprendedor debe estar full time para sacar adelante su proyecto, porque, a parte de la idea, debe formarse continuamente, tener ambición (muy importante para no acomodarse) y estar muy convencido de lo que va a hacer, es decir, emprender no es fácil y hay un gran impacto personal por el cambio de vida. Si no lo gestionas bien, se te pueden ir al garete muchas estructuras formadas anteriormente: pareja, amigos, familia, salud…
Errores de Idea
La idea está muy bien, pero no es la panacea. De ideas no se puede vivir, lo que hay que hacer es ponerlas en práctica y ejecutarlas. ¿Crees que es mejor generar ideas continuamente o llevar a cabo una de ellas y empezar a trabajar para que te vaya dando sus frutos poco a poco?
Un profesor que tuve en la Escuela de Negocios ESIC decía: “No llegues a la parálisis por el análisis”. ¡¡Actúa, que el tiempo pasa!! Y si no funciona… a otra cosa. Es más práctico y eficaz ejecutar las ideas que generarlas. Eso si, la idea hay que tenerla, pero no vayas más allá.
Errores financieros
Se trata de hacer los deberes bien y plantear el proyecto de la manera más realista posible en el Plan de Negocio. Es fundamental tener sentido común para que el Plan de Negocio no sea irrealizable.
Por otro lado, muchas veces nos obsesionamos en la búsqueda de capital para avanzar en lugar de buscar clientes. Esto puede llegar a ser un problema grave, porque la búsqueda de clientes es crucial para consolidar la empresa, sobre todo si es del sector servicios.
Con respecto a la gestión de la tesorería también suele haber muchos problemas. Un gran número de empresas son lanzadas sin conocimientos en este tema y cometen bastantes errores.
Errores vinculados al mercado
Muchos emprendedores comienzan su andadura sin investigar el mercado y sin saber cual es su competencia. Esto es muy importante, sobre todo para saber cómo debe zarpar su nave contra viento y marea. Para ello debes ver el tamaño del mercado, las zonas, oportunidades que te puedes encontrar y las dificultades. Todo esto tenerlo en cuenta para comenzar.
¿Cuál es la mejor manera para hacer una investigación de mercado?
Sin duda, Mr. Google, pero además hoy en día existen otras herramientas maravillosas para hacer una investigación de mercado muy exhaustiva que te permiten saber TODO de tu competencia: Slideshare, Youtube o Linkedin.
Errores vinculados al modelo de negocio
Lo primero que hay que hacer es saber cómo funciona ese negocio y conocer sus entresijos. Si no conocemos esto, podemos estar dando palos de ciego durante mucho tiempo.
Errores en Gestión
Uno de los problemas más frecuentes que comenten los emprendedores es en la selección del personal y en la retención del talento. Además, el tardar en despedir a gente es otro de los errores que te puede salir muy caro como emprendedor. En definitiva es no saber retener a los muy buenos y no saber cuándo echar a los muy malos.
¿Y qué ocurre cuando lo que estoy emprendiendo no va bien? Pues reinventante. Hay que reinventarse, pero no hagas lo mismo. Haz otra cosa.
En fin, como podéis comprobar, son muchos los errores que cometemos los emprendedores. Por eso es bueno tenerlos en cuenta para poder recular a tiempo.
Si queréis más información sobre este tema, no dejéis de visitar el blog de Carlos Blanco y de leeros su libro “Los principales errores de los emprendedores” de la editorial Ediciones Gestión 2000.
Carlos, un placer haberte tenido por IESE.