Recuerdo cuando comencé mi carrera en la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad San Pablo (hace ya tanto tiempo que me da vértigo mirar hacia atrás). Una de las metas que me propuse, y me consta que también se la propusieron muchos compañeros de promoción, fue que intentaría por todos los medios ser un gran periodista comprometido con la veracidad y el rigor al servicio de la libertad y el derecho a la información de todos los ciudadanos. Un sueño que no se llegó a cumplir entre otras cosas porque un día me pregunté qué es el Marketing y en qué consiste el Marketing.
Tal fue mi curiosidad que empecé a investigar y descubrí queel Marketing no es más que el conjunto de las palabras Mercado y Ventas. Es decir, todo lo que hacemos en un mercado para vender más y mejor que antes. En definitiva, lo que buscamos cuando hacemos Marketing es vender más cosas a más gente, más veces. Así de sencillo. Eso sí… con unos criterios de diversificación, fidelidad, ética, etc.
El mercado pone a disposición de las empresas una serie de herramientas de Marketing que al aplicarlas de forma correcta y estratégica nos reportará una posible obtención de beneficios y, por consiguiente, la esperada satisfacción de nuestros clientes. Todos sabemos que un cliente satisfecho actuará de portavoz o de prescriptor de nuestros servicios o productos en su entorno y seguro que esto hará que a través de él nos puedan salir otras oportunidades de negocio.
Pero como todas las áreas de la empresa, tenemos que tener en cuenta a los que más saben de esto. En el caso del Marketing no podemos dejar de lado a los señores Lambin, Philip Kotler, Clive Barwell y Peter Drucker. Quizá no te suenen o no hayas leído nada de ellos, pero como esto es un post en el que te estoy intentando contar cuál es la definición más correcta del Marketing, no tengo más remedio que nombrarlos y decirte qué es marketing para ellos:
Para Lambin, el Marketing está orientado hacia la satisfacción de las necesidades y deseos del individuos y organizaciones, por la creación y el intercambio voluntario y competitivo de productos y servicios generadores de utilidades. A su vez, Phipip Kotler coincide con Lambin en decir que el Marketing satisface necesidades y deseos de los grupos escogidos de clientes, obteniendo de ellos un beneficio.
Con estas dos definiciones ya tenemos claro que hacemos marketing para satisfacer una serie de necesidades en un mercado con el objetivo de obtener un beneficio.
Pero vamos más allá y veamos qué es marketing para Clive Barwell: “Con el Marketing pretendemos obtener ventas con ganancias y satisfactoria recuperación de las inversiones, identificando y anticipándose a las necesidades del consumidor”. Lo mismo que los anteriores, pero con otras palabras. Aparece entonces Peter Drucker y nos apunta que el Marketing es tan básico que no puede considerarse una función por separado. Es el negocio total contemplado… desde la perspectiva del cliente.
Ahora, sacad vuestras propias conclusiones y definir qué es Marketing para vosotros. Si queréis me podéis enviar vuestras respuestas respondiendo a esta artículo.
Eso sí, lo que está claro es que el Marketing tiene un fin lucrativo y no es una disciplina aislada, sino que es necesaria la involucración de todos los departamentos de la empresa para que esto funciones. Yo siempre digo que el Marketing es como el motor de un coche; cuanto más Marketing hagamos, más aceleramos y por consiguiente más avanzamos. Si no aceleramos, es que no hacemos Marketing y no avanzamos. Pero debemos tener en cuenta que si ponemos un motor solo encima de una mesa no hace nada, puede estar muy revolucionado que seguro que no avanzará absolutamente nada. Para poder avanzar es necesario contar con una carrocería, con cuatro ruedas, con un interior, etc. De ahí que el Marketing no hace nada si no está dentro de una estructura y no cuenta con el apoyo de los diferentes departamentos de la empresa.
El mercado es la gente
Desde el punto de vista del Marketing, el mercado es la gente, las personas, que están comprando los productos o servicios generados por una determinada empresa (mercado real) o, que pueden comprarlos en un futuro (mercado potencial). De ahí que para que esto se cumpla los compradores deben disponer de los recursos económicos para la compra y quieran compartir una necesidad que tengan o una preferencia en un producto o servicio.
Como podéis comprobar el Marketing va más allá de poner un anuncio en el periódico local de mi ciudad o de hacer unas tarjetas de visita para diferenciarme de la competencia de en frente que se que no las tiene. Recuerda, con Marketing podemos avanzar más, sin él podemos quedarnos donde estamos o retroceder ya que no le estamos dando importancia a las exigencias del mercado.